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Cómo mantener las herramientas neumáticas y optimizar el rendimiento

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Las herramientas neumáticas están fabricadas para un uso muy intensivo y son elementos esenciales en entornos industriales, pero sus necesidades de mantenimiento frecuentemente se pasan por alto. Sin embargo, un cuidado apropiado de las herramientas neumáticas es clave para garantizar la productividad, y satisfacer las demandas de los clientes y la seguridad de los operadores.

Los encargados de mantenimiento industrial están bajo una presión constante para maximizar el tiempo de producción. Las herramientas neumáticas ayudan a conseguir este objetivo cuando están disponibles y funcionan a un nivel óptimo para desempeñar un trabajo de alta calidad.

Las herramientas neumáticas son sistemas mecánicos que comprenden los motores neumáticos, las piezas de desgaste (como aletas, cojinetes y juntas) y otros elementos. Al igual que con otros sistemas mecánicos, el mantenimiento es esencial, no sólo para garantizar el mejor rendimiento de las herramientas, sino también para mantener sus especificaciones, como, por ejemplo, la potencia y la velocidad. Con el mantenimiento adecuado, las herramientas neumáticas ofrecen productividad constante y un tiempo de actividad máximo, evitando las interrupciones inesperadas del trabajo, al tiempo que contribuyen a garantizar la seguridad de los operadores.

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¿Qué conlleva el mantenimiento de una herramienta neumática?

El mantenimiento implica mantener la herramienta en buen estado de funcionamiento. Hay dos tipos de mantenimiento:

  • Mantenimiento preventivo implica todas las acciones simples, regulares y previsibles que se pueden adoptar para reducir los riesgos de fallo de herramienta. Dichas acciones van desde la lubricación regular hasta la sustitución de aquellas piezas que sea previsible que se desgastarán, antes de que causen tiempos de parada.
  • Mantenimiento correctivo: se lleva a cabo de forma reactiva e incluye cualquier acción para reparar la herramienta después de un fallo imprevisto. Este deterioro puede deberse a una pieza rota o a la falta de mantenimiento preventivo adecuado.

Mantenimiento preventivo básico para herramientas neumáticas

  • Garantizar la calidad y la presión del suministro de aire. Es importante que el aire esté limpio y lubricado, por lo que usar un lubricador regulador de filtro (o FRL) optimizará el rendimiento y la vida útil de la herramienta. Encontrará indicaciones precisas al respecto en el manual del operador de la herramienta. Para obtener más información, descargue gratuitamente nuestra guía técnica «¿Su instalación de herramientas neumáticas es correcta?».
  • Configurar y lubricar la herramienta como se indica. Siga las especificaciones del fabricante con respecto a la configuración, la lubricación y las piezas de desgaste para cada una de las herramientas. Los kits de mantenimiento para fabricantes están diseñados para facilitar aún más el proceso. La frecuencia con la que es necesario cambiar piezas de desgaste estará determinada por las especificaciones de la herramienta y la aplicación.
  • Optimizar el tiempo de parada así como el de actividad. Cuando una herramienta neumática se retira de la línea de producción para llevar a cabo el mantenimiento planificado, aproveche la ocasión para efectuar una comprobación visual y evaluar también el desgaste de otras piezas. Si es preciso montar y desmontar los componentes, asegúrese de que estas operaciones se realizan según las recomendaciones del fabricante, y que se utilizan piezas de repuesto originales.
  • Almacenar bien las herramientas. Cuando no se utilizan, las herramientas deben guardarse lejos de entornos húmedos o temperaturas extremas, siguiendo las recomendaciones del manual del usuario de la herramienta.

Fuente: Chicagao Pneumatic

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